El legado de Benji Wilson en la NBA
La historia personal y deportiva de Benji Wilson es más larga en su legado que en su propia historia en sí misma. Probablemente muchos de vosotros no habréis oído nunca hablar de Benji Wilson y otros lo hayáis oído citar como uno de los posibles grandes jugadores que la mala suerte nunca le permitió jugar en la NBA.
Benji fue un extraordinario jugador de baloncesto que llegó a ser nombrado mejor jugador de Instituto en el año 1984.
Su estilo de juego para que os hagáis una idea, el de un Magic Johnson con un gran tiro en suspensión.
Se formó en el Instituto Simeon Career Academy de la ciudad de Chicago. Muchos veían en él un futuro ídolo local de la Ciudad del Viento.
Consiguió por primer vez en su historia llevar al Instituto Simeon a ganar el campeonato estatal.
Con sus 2.03 cm se convirtió en el jugador más prometedor del país y varias universidades (e incluso Nike) ya habían puesto sus ojos en él pero la mala fortuna de un encontronazo con unos pandilleros le llevó a recibir dos disparos que horas más tarde le causarían la muerte.
Para muchos probablemente una mejor atención médica de Benji en el hospital Saint Bernard le hubiera salvado la vida pero un cumulo de circunstancias complicaron extraordinariamente los disparos que recibió en la ingle y en el abdomen a pesar de que sólo fueron con una pistola de calibre 22.
El 21 de noviembre de 1984 la madre de Benji decidió que le desconectaran de la máquina que le mantenía con vida artificialmente y falleció uno de los hombres que parecía destinado a reinar en el baloncesto de los 80’s y 90’s en la NBA.
Aquella muerte de Benji Wilson conmocionó la ciudad de Chicago y más de 10.000 personas acudieron a su entierro.
A partir de aquel momento la figura de Benji se convirtió en objeto de culto en el Simeon.
De hecho no sólo llegó su legado a los jugadores del Instituto de Chicago sino que otros hombres como Juwan Howard llevó su número 25 cuando formó parte de los Fab Five de la Universidad de Michigan.
Nick Anderson fue un gran amigo de Benji Wilson e incluso en el último año de Instituto de ambos iban a jugar juntos en Simeon pero la muerte de Wilson impidió ese hecho.
Anderson siempre llevó el 25 en honor a su amigo Wilson en la NBA.
Años más tarde la gran estrella Derrick Rose también se formó en Simeon y tras conocer la historia de Wilson decidió llevar su número 25 consiguiendo volver a ganar el campeonato estatal.
A partir de ese momento se retiró la camiseta número 25 de Simeon y se entrega al mejor jugador de cada año como homenaje a Wilson y a Derrick Rose.
Por su parte Derrick Rose llevó el 25 en su etapa de los Knicks en honor nuevamente a Wilson.
Otro de los grandes jugadores formados en Simeon fue Jabari Parker.
Parker también llevó el 25 en honor de Wilson pero lo hizo en sus zapatillas ya que el número ya estaba retirado y utilizó el 22.
Las graves lesiones y la mala suerte en general de otros grandes jugadores como Derrick Rose y Jabari Parker también han creado una leyenda urbana en relación con la maldición del 25 de Simeon.
Sea como sea la vida y el baloncesto de Benji Wilson han ido más allá de su tiempo y para siempre en la historia quedará el nombre del que pudo haber sido uno de los grandes.