Última oportunidad para los Cavs de ganar
Los Cleveland Cavaliers están ante su última gran oportunidad de ganar un segundo anillo y emular el éxito logrado en 2016. La segunda etapa de LeBron James acabará al término de la temporada venidera porque el hijo prodigo saldrá al mercado en el verano de 2018 a explorar sus opciones en la NBA y buscar acomodo en una franquicia con más historia y tradicional, presumiblemente en la Conferencia Oeste.
James es el alma mater de un equipo que ha dominado a su antojo el Este en los últimos tres años pero que no tiene potencial suficiente para plantar batalla a los Cleveland Cavaliers, que son los actuales campeones y los favoritos en las apuestas de baloncesto al anillo.
El número 23 tiene la responsabilidad de no irse sin antes llevar al conjunto de su Estado, Ohio, a la gloria por segunda vez en un nuevo intento personal de acercarse a los números de Michael Jordan. Su ídolo de la infancia está todavía a tres anillos de distancia y con 32 años las opciones de superarle empiezan a alejarse por momentos.
De ahí su deseo de construir un bloque tan sólido como los Warriors lejos de Cleveland que le permita luchar de tú a tú con el conjunto más competitivo de la NBA de todos los tiempos.
Ya tiene a Wade a su lado en los Cavs
A su causa pretende sumar a Carmelo Anthony, así como Dwyane Wade. Ya ha reclutado al escolta para el último año en los Cavs y juntos se marcharán a desarrollar ese proyecto, que desveló hace unos meses Blake Griffin, en el Oeste.
Ya construyó un vestuario rodeado de amigos en los Miami Heat y los resultados hablan por sí solos.
En cuatro años ganó dos títulos y puso fin a las temporadas de sequía que caracterizaron su primera etapa en los Cavs. James tiene el gallinero revuelto ante los acontecimientos recientes en el vestuario. Había compañeros partidarios de Kyrie Irving en la lucha de egos que mantuvo con la otra estrella del plantel y que derivó en la salida de Irving rumbo a los Boston Celtics.
Necesita a todos de su lado para que juntos hagan de esa superioridad esperada en el Este extensible al resto de la competición.
Es un hecho que la pretemporada ha comenzado con contratiempos y habrá que ver si los resuelven juntos. El papel de Irving lo iban a ejercer entre Derrick Rose e Isaiah Thomas, pero éste segundo no estará recuperado de una lesión de cadera hasta enero y ya se sabe lo propenso que es Rose a las lesiones. A priori, los Cavs partirán con un quinteto inicial formado por James, Rose, Wade, Kevin Love y Jae Crowder.
Un equipo inicial muy veterano que precisará de la aportación de la segunda unidad y ahí es donde entrará la capacidad de anotación que pueden aportar jugadores como JR Smith, Tristan Thompson, Kyle Korver o Jeff Green. En realidad, es un plantel hecho a medida para que James pueda moverse alrededor de su media de puntos, que asciende a 32,8 por partido.