Kobe la estrella que nunca dejará de brillar
Hoy 26 de enero de 2020, Kobe Bryant junto a su hija Gianna de tan sólo 13 años han perdido la vida en Los Angeles en un accidente de helicóptero. Este es el frío resumen de un día negro para la historia del deporte que pasará a nuestro amargo recuerdo por habernos robado a una de las mayores estrellas de todos los tiempos de la NBA.
Es difícil escribir y hablar de consternación cuando realmente el dolor de la perdida de Kobe va más allá de lo deportivo. Voy a hablar de él por lo que me hizo sentir ya que lamentablemente nunca le llegué a conocer como persona.
La figura de Kobe Bryant me hizo recuperar la esperanza de que había un más allá de los Chicago Bulls de Michael Jordan. Cuando el mítico jugador de los Bulls llegó al ocaso de su carrera en seguida surgieron supuestos aspirantes a su trono como herederos de su legado.
Ninguno de los jugadores que posteriormente llegaron tras Jordan, le hicieron ser olvidado, ni incluso superado en la memoria de los aficionados, pero hubo un jugador distinto que hizo algo impensable en aquel momento.
Ese hombre era Kobe Bryant que con el cartel de otro heredero más de Jordan, supo ser el mismo y pasar a ser considerado algo más que un heredero. Pasó a ser una alternativa.
Kobe dejó de ser el siguiente Jordan, para ser el primer Kobe Bryant.
Un trabajador innato, un competidor hasta la extenuación y sobre todo un líder.
Podría escribir durante horas de Kobe Bryant pero realmente en estos momentos no me apetece recordar sus múltiples actuaciones épicas, ya que ese recuerdo me hace todavía sentirme un poco peor con la tristeza de los acontecimientos.
Kobe para mi siempre estará en mi recuerdo como el hombre que me hizo creer que los 100 puntos de Wilt Chamberlain no era una quimera, el héroe que fue capaz de despedirse cojeando del baloncesto anotando 60 puntos y como el jugador que me consiguió volver a enganchar a un deporte que realmente nunca he dejado de amar.
Allá donde estés, o allá donde vayas después de este paso que es la vida, te deseo lo mejor y te agradezco todo lo que me has hecho disfrutar con tu baloncesto.
Kobe Bryant 1978-2020, la estrella de la NBA que nunca dejará de brillar.
A diferencia de ti, al principio me molestaba ver jugar a Kobe, su cara de arrogancia simplemente no la podía soportar. Me desagradaba verlo en las duelas y copiar a MJ. Pero con el tiempo, aprendí a verlo como lo que fue, un gran jugador, tenía una mentalidad tan ganadora y una lealtad a sus colores que ya ni en el basquetbol de la NBA era fácil de encontrar. Al final de su carrera, cuando tuvo aquella lesión que lo alejo de las canchas, a mi también me dolió, y cuando dijo adiós al basquetbol no podía creer que aquel joven jugador delgado que lo único que quería era colgarse del aro, había pasado a ser uno de los mas grandes jugadores que han pisado las duelas de la NBA. DEP la Mamba Negra.